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En BMUM disponemos de una consulta para el diagnóstico y tratamientos de enfermedades circulatorias venosas. Se desarrollan por un mal funcionamiento a nivel de las válvulas de las venas superficiales o profundas de las piernas que provocan que estas no sean capaces de retornar adecuadamente la sangre al corazón y producen varices en piernas, pelvis, trombosis, arañas vasculares, patologías venosas pélvicas y múltiples patologías.

Los distintos tratamientos dirigidos a la patología venosa han evolucionado de forma importante en los últimos años, habiéndose desarrollado técnicas mínimamente invasivas que incluso pueden realizarse fuera de un quirófano.

-Escleroterapia: Es el tratamiento indicado para las indicado en arañas vasculares y varices reticulares. Se basa en la inyección de un liquido o espuma esclerosante en el interior de las varices lo que provoca su desaparición progresiva en el tiempo.

-Pegamento biológico: Es uno de los tratamientos de las varices tronculares y que presentan una alteración en alguna de las venas safenas que suelen ser la causa de las varices. Se trata de la inyección de un agente adhesivo a través de un catéter que se introduce en el interior de la vena. Es un procedimiento sencillo que se realiza en quirófano, con anestesia local, sin molestias posoperatorias y recuperación inmediata. Aporta una solución muy eficaz y duradera en el tiempo.

-Ablación por radiofrecuencia: Es otro de los tratamientos indicados en varices tronculares. Consiste en la aplicación de una energía a través de un catéter introducido en la vena provocando la oclusión del misma. Se trata de una técnica mínimamente invasiva que se debe realizar en un ambiente quirúrgico.

-Tratamiento quirúrgico clásico: Se plantea en el caso de varices muy evolucionadas o en aquellas que presentan contraindicaciones para tratamientos quirúrgicos menos invasivos. Consiste en la extracción de la vena safena y ligadura de las venas perforantes incompetentes.

-Embolización de varices pélvicas: Consiste en una cirugía que se realiza de forma endovascular. A través de una pequeña punción en el brazo o en el cuello, se coloca un introductor que nos permite navegar a través de las venas con catéteres y guías para acceder al sistema venoso pélvico. Se realiza en una sala de radiología intervencionista.

El objetivo de estos tratamientos es ocluir las venas ováricas o ramas de la vena hipogástrica que no funcionan correctamente, lo que produce un descenso de la presión en las varices pélvicas que lleva asociada una mejoría de los síntomas. Para ello pueden introducirse diferentes dispositivos (Coils/Amplatzer) en las venas malfuncionantes con el objetivo de ocluirlas consiguiendo que la circulación venosa pélvica recupere la normalidad.